Julio López Escobedo, es el único artesano que en la actualidad continúa con el trabajo en rocas como la caolinita, aplicando técnicas ancestrales basadas en el desgaste, el pulido y el bruñido, tratando así de replicar técnicas lapidarias prehispánicas.
Julio representa la tercera generación de hombres dedicados a recuperar la historia que data once siglos atrás, pues desde su niñez, ha sido su pasatiempo, a diferencia de sus antecesores, él no elabora estas piezas con fines comerciales, sino para autoconsumo familiar, dadas las condiciones actuales el trabajo artesanal de la piedra no representa una actividad económicamente redituable para la población local, por lo que sería indispensable explorar fuentes de financiamiento que fomenten la capacitación técnica, creación de talleres familiares especializados, aprovechando las materias primas locales disponibles en los alrededores de Yago.