Tal vez el concepto de la palabra “manjar” no es el mismo para muchos de nosotros, algunos lo atribuyen a platillos costosos inalcanzables para el bolsillo de la mayor parte de la población.
Sin embargo los platillos más deliciosos son la mayoría de las veces sencillos, económicos y muy accesibles por ser baratos y además fáciles de preparar, uno de ellos son los tradicionales frijolitos con queso.

Aquel nayarita que diga que nunca comió frijoles seguramente miente, su inigualable sabor al guisarlos en aceite o en manteca , la forma de machacarlos dejarlos hervir y al final añadirle quesito fresco encima es un verdadero poema culinario.
Los frijolitos quedan bien con todo, un platillo sin frijoles no está completo. Hay quienes prefieren degustarlos solitos y acompañarlos con una buena salsa picante o con chiles jalapeños, las tortillas calientitas son un plus que remata con su maravilloso sabor.
¿Cuándo fue la última vez que comiste un buen plato de frijoles?